Un nuevo investigación realizado en el Universidad de Liverpool John Moores En colaboración Con la Universidad de Liverpool Se ha centrado en la forma en que los colores, los olores y los perfumes pueden asociarse, especialmente en lo que respecta al pensamiento humano. Según el equipo de investigación, muy a menudo tendemos a asociar un olor con el color que nos recuerda y viceversa. Precisamente por esta razón, queríamos probar este estudio a través de un experimento Donde algunos participantes tuvieron que asociar manchas de color con un tono muy preciso después de anular varios olores.
Este color ha sido identificado en el sombra de gris neutropero se supo que la mayoría de los examinados tienden a asociar olores particulares con tonos considerados calientes, lo que demuestra cómo Más sentidos logran interactuar para obtener un solo resultado. De hecho, cuando se nos ofrece un perfume particularmente dulce y brillante, tendemos a asociarlo con frutas como cereza y fresa, mientras que, en cambio, cuando pensamos en el café, estamos acostumbrados a traer el aroma de la bebida a algo marrón y intenso. Es por eso que los olores y los colores podrían influir entre sí.
Las conexiones entre los sentidos y la interpretación de los olores y los colores
Ciertamente no es la primera vez que se lleva a cabo un estudio similar, incluso si en el pasado la atención de los investigadores se ha centrado en diferentes conexiones, como el sonido y la temperatura que requieren un alto nivel de atención para combinarse entre sí. Los participantes fueron engañados en varios casos y solo después de identificar el olor, lograron asociarlo con un color bien determinado.
El cerebro, por lo tanto, logra interpretar el color de cierta cosa sobre la base del olor que logra capturar pero, al mismo tiempo, también un impulso visual Podría influir en lo que nuestra nariz puede transponerse. En algunos casos, se produjo una mezcla sensorial que llevó a las personas examinadas a asociar los elementos que en realidad estaban muy lejos del otro. De esta manera, demuestra ser cómo, una vez más, el entorno externo logra enviarnos señales que pueden ser tan engañosas.
El estudio en cuestión se publicó en varias revistas científicas y tiene el propósito de inducir un nuevo pensamiento en humanos, o qué nos permite comprender cómo percepción del mundo de alguna manera puede estar relacionado con los olores y nuestra forma de percibirlos.