microsoft está lanzando una nueva tecnología de refrigeración para su centro de datos que elimina el uso de aguauna iniciativa que tiene como objetivo reducir significativamente el impacto ambiental de la creciente demanda de infraestructuras relacionadas con servicios de inteligencia artificial. El nuevo diseño, que comenzó en agosto, presenta un sistema de “circuito cerrado” que recicla el agua introducida durante la construcción, eliminando así la necesidad de un suministro continuo de nuevos recursos hídricos.
La carrera hacia modelos de inteligencia artificial cada vez más avanzados tiene costes importantes para el medio ambiente: los centros de datos requieren una cantidad de energía altísima y a esto se suma el consumo de agua, necesario para la mayoría de sistemas de enfriamiento. Los gigantes tecnológicos buscan desesperadamente soluciones innovadoras para mitigar el impacto de la IA en el medio ambiente.
De media, un centro de datos consume 125 millones de litros de agua al año
Según Microsoft, cada centro de datos convencional utiliza en promedio más de 125 millones de litros de agua al año para enfriar chips y servidores. Con el nuevo diseño se eliminará por completo este consumo, manteniendo el uso de agua para necesidades básicas como baños y cocinas de los trabajadores.
Nuevos centros de datos, incluidos los que se encuentran en construcción en Fénix (Arizona) y Mount Pleasant, Wisconsin, adoptarán esta tecnología a partir de 2026. Sin embargo, las instalaciones que ya están en funcionamiento seguirán utilizando tecnologías tradicionales o mixtas.
Microsoft ha gastado más de 50 mil millones de dólares en inversiones en infraestructura, la mayor parte de ellos destinados a la construcción de centros de datos. Con planes de superar esta cifra en el año en curso, la empresa enfrenta desafíos ambientales relacionados no solo con el consumo de agua, sino también con la creciente demanda de energía para alimentar sus servidores.
La atención a la sostenibilidad es especialmente crucial en zonas cálidas y áridas como Arizona y Texas, donde la disponibilidad de agua es limitada.