Cuando pensamos en Abby Anderson en El último de nosotros Parte 2es imposible imaginar a alguien más que no Laura Bailey en el papel.
Sin embargo, su selección para el personaje de la obra maestra Naughty Dog (que encuentras en Amazon) estaba lejos de ser obvia.
Durante un panel al DIC 2024 (a través de Eurogamer), el copresidente de Naughty Dog, Neil Druckmannreveló que el estudio inicialmente no quería escribir Laura Bailey para el papel de Abby.
¿La razón? Ya estaba «en todas partes» en la industria de los videojuegos. Bailey ya había dado la voz a numerosos personajes prominentes, incluida Nadine Ross en Uncharted 4: Fin de un ladróny el estudio estaba convencido de que alguien menos reconocible por el papel de la controvertida «heroína» de El último de nosotros Parte 2.
¿Qué cambió de opinión a Naughty Dog? El propio Druckmann, mirando las audiciones, estaba seguro de que el papel iría a otra persona.
Sin embargo, después de analizar el rendimiento del marco para el marco, se dio cuenta en Bailey Algo único: Un momento de vulnerabilidad que ninguna otra actriz había mostrado.
Este detalle convenció al equipo de revisar la decisión. Druckmann demostró ese instante al equipo de perros traviesos, y al final el equipo cambió: Bailey era perfecto para Abby.
El resto es historia: la actuación de Laura convirtió a Abby en uno de los personajes más discutidos y complejos en la historia de los videojuegos. Su trabajo fue reconocido con el premio al mejor rendimiento en los Game Awards 2020.
Si el talento de Bailey fue recompensado por los críticos y la industria, el público no era tan espaciado. El personaje de Abby, con su papel central en la trama y su cargo emocional, dividió a los fanáticos De El último de nosotros.
Bailey recibió amenazas de muerte, no solo contra ella, sino también contra su hijo. Un nivel de odio inaceptabley la situación no parece destinada a mejorar con la adaptación de HBO de la segunda temporada de El último de nosotros.
Kaitlyn Deverla actriz elegida para interpretar a Abby en la serie de televisión, solicitó medidas de seguridad adicionales durante la filmación, para protegerse de los posibles ataques de los fanáticos más extremistas.
El caso de Laura Bailey es solo otra demostración de cómo la toxicidad en el mundo del videojuego ha alcanzado los niveles preocupante.
Ya no se trata de críticas simples a un personaje o una elección narrativa, sino de amenazas reales que obligan a los actores y desarrolladores a vivir en el miedo.
Pero si hay una lección que podemos extraer de esta historia, es que el talento va más allá de los prejuicios: Laura Bailey estaba «en todas partes», es cierto. Pero ningún otro podría ser Abby.