Cuando escribí mi reseña de Dragon's Dogma 2, había jugado durante 100 horas, completando una partida y comenzando la segunda. Es muchísimo juego para jugar en una sola semana. Sin embargo, la mayor parte de ese tiempo lo pasamos preparándonos para el verdadero Dragon's Dogma 2.

Cuando creas a tu pequeño bebé Arisen, eliges una de cuatro vocaciones: luchador, mago, ladrón y arquero. No puedes equivocarte con ninguno de ellos. Una vez que llegues al centro de la primera área, podrás desbloquear dos más: Hechicero y Guerrero. Estas seis vocaciones forman la lista de clases básicas, y podrás afrontar cualquier cosa que te depare el juego si sigueslas. Pero hay cuatro más por descubrir, que ofrecen formas de jugar más avanzadas.

(Crédito de la imagen: Capcom)

De estos cuatro, probablemente encontrarás primero el Mystic Spearhand, aunque si has leído mi reseña sabrás que tuve algunos problemas para desbloquearlo. Es una clase híbrida marcial/mágica, y es absolutamente genial. El Trickster probablemente será tu segundo y, al igual que Mystic Spearhand, solo necesitas hablar con alguien para desbloquearlo. Esta vocación es una propuesta única que te coloca en un papel de apoyo, donde usarás ilusiones para manipular a tus enemigos y causarás muy poco daño directo.

Artículo anteriorA "brillante idea" ¡El director de la película The Legend of Zelda tiene un anuncio muy especial que hacer!
Artículo siguienteLa puerta del Titanic se vende en una subasta por un precio enorme, supera a Indiana Jones y The Shining Props
Dario Reblon
Me apasiona la fotografía y la tecnología que nos permite hacer todo lo que siempre soñamos. Soñador y luchador. Actualmente residiendo en Madrid.