Cero Cero Cero Cero nos recuerda a Formas de sonido – aunque este último sin duda tiene un mejor nombre. ¿Te acuerdas de esas cobardes etapas de pantalla única en la mencionada salida exclusiva de PlayStation? Este juego de plataformas monocromático es como 100 de ellos, cada uno gira al azar cada vez que mueres. Y morirás, una y otra vez.
La mecánica del juego es simple: recoges un McGuffin en forma de píldora y luego lo llevas a la puerta de salida. Las etapas incluyen todo tipo de desafíos, como plataformas que aparecen y desaparecen cuando saltas, robots que te persiguen y pelotas Pong que rebotan. La jugabilidad es un poco floja, pero generalmente se siente bien.
Y esto significa que tendrá que atribuir cualquier error a su propio juicio pobre en lugar de la curva de dificultad infernal del título. Exige niveles obscenos de paciencia, pero es más alegre y satisfactorio una vez que encuentre la "zona". Una banda sonora decente acompaña la acción, mientras que un modo Hardcore te reta a superar tantos niveles como puedas con una sola vida.