Hardware de noticias Un nuevo polvo energético para revolucionar los coches eléctricos

Investigadores de la Universidad de Deakin en Australia han logrado transformar este combustible en polvo, facilitando enormemente el transporte. La tecnología tiene el potencial de revolucionar los autos eléctricos y la forma en que se cargan.

Transporte y almacenamiento de hidrógeno simplificado

Sí, sí, el hidrógeno en polvo es posible. A menudo denominado en inglés como «hidrógeno de estado sólido»,
investigadores
Los australianos han encontrado potencialmente la solución al gran problema del hidrógeno. Es un gas volátil de difícil transporte, ya que es altamente explosivo, especialmente cuando se comprime a 700 bar. Los tanques que contienen hidrógeno durante el transporte deben ser reforzados. Sigue siendo una energía aterradora, que recuerda al accidente del dirigible alemán Hindenburg en 1937.

Hoy en día, la tecnología ha evolucionado mucho y los envases ya no son los mismos. Transportar un gas en estado sólido facilita absolutamente todos los pasos del suministro. Junto con la producción de gas, estas son las dos etapas que más energía consumen.. Esto es también lo que hace que el desarrollo de los coches de hidrógeno sea tan lento en la actualidad. Hyundai y Toyota son actualmente las dos grandes automotrices que invierten en el sector.

Como recordatorio, un coche de hidrógeno se parece mucho a un coche eléctrico en su funcionamiento. El hidrógeno se consume en la pila de combustible que libera electricidad y vapor de agua. Luego, la energía se envía al motor eléctrico.

Una revolución en la producción de hidrógeno

Los investigadores australianos no solo han pasado el hidrógeno del estado gaseoso al estado sólido consumiendo menos energía, también es la producción la que cambia. Por lo tanto, es posible producir hidrógeno sólido consumiendo solo el 10% de la energía habitual.

La extracción del hidrógeno actual se puede realizar de forma limpia mediante electrólisis o mediante criogenia de hidrocarburos. Los investigadores utilizan un método mecanoquímico revolucionario. El resultado es una producción menos intensiva en energía y más respetuosa con el medio ambiente que produce un combustible más estable. Es en la estabilidad que se basa todo el interés de la investigación.

Este proceso puede ser el detonante que permita a toda la industria automotriz poner el pie en la puerta.

Hacia nuevas aplicaciones

Esta forma de almacenar energía puede permitir que industrias como la del transporte por carretera cambien su forma de operar. Esto abre la puerta a una entrega de hidrógeno muy simplificada a los puntos de distribución. El transporte de mercancías y personas en su conjunto puede beneficiarse de ello.

El transporte de mercancías, en particular, es uno de los mayores contaminantes. Transformar la forma de alimentar esta industria supondría un cambio colosal en la huella de carbono actual. El transporte público también tiene mucho que ganar si se cambia al hidrógeno. Los buses actualmente eléctricos podrían seguir siéndolo, se trataría de reemplazar parte de las baterías con reservas de hidrógeno, así como celdas de combustión.

En generalel mundo de los coches eléctricos ha evolucionado tanto que el único freno real a día de hoy es el precio de los vehículos. Sabiendo que las baterías representan casi un tercio del precio de coste de un coche, el ahorro en la compra sería muy importante. Sobre todo porque la industria del coche eléctrico no tiene mucho que evolucionar para adaptarse a esta revolución.

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Dario Reblon
Me apasiona la fotografía y la tecnología que nos permite hacer todo lo que siempre soñamos. Soñador y luchador. Actualmente residiendo en Madrid.