Cuando le pasó a Plutón, nadie dijo nada, no éramos plutonianos. Ahora que también ha sucedido con Venus y Júpiter, miradas cada vez más preocupadas se vuelven hacia la comunidad científica, que es la única que puede decidir unilateralmente qué constituye un planeta o no. Como pareciera que para salvar nuestro sistema estelar basta con pasar por Neptuno, Urano, Saturno, Marte, la Tierra y Mercurio antes de llegar al Sol, parece prudente cuestionar los dibujos de los astrónomos japoneses. ¿Quiénes son estas personas que deciden la importancia de un planeta, bueno para salvar o dejar perecer? El día en que una raza extraterrestre se haga verdaderamente con el control de nuestra estrella, como es el caso de Sol Cresta, no tendremos que venir llorando si los venusianos y los jupiterianos se niegan a echarnos una mano después de haber sufrido semejante afrenta.