La gravedad de los hechos no tiene parangón: para los aficionados a los juegos de carreras futuristas, las cosas se quedan atascadas en la línea de salida. Por un lado, la franquicia F-Zero, a falta de novedad real, está condenada al olvido o confinada al homenaje en Mario Kart 8 mientras que por otro, la licencia WipEout está actualmente ausente de los radares de la PlayStation 5, ya sea vía una nueva versión o una nueva entrega real. Lógicamente, estos lugares vacantes han sido ocupados por varios juegos que se proclaman dignos herederos de un género que favorece tanto las sensaciones de velocidad como el uso de objetos y armas. En la subcategoría de títulos basados únicamente en la conducción, el primer Redout lanzado en 2016 pudo presentar algunos argumentos a su favor. El pequeño estudio turinés 34BigThings ha ofrecido recientemente su secuela directa, sobriamente llamada Redout II, más ambiciosa y rica en contenido sobre el papel. ¿Incluso si eso significa exagerar y olvidarse de corregir ciertas fallas evidentes? Embárcate junto a Brad Cockpit para descubrir qué está pasando.
Prueba: Redout II: el espejismo de WipEout
